Háblame Dios (Parte 2)

Querido Dios

He estado pensando detenidamente algunas cosas acerca de nuestra relación. ¿Y sabes una cosa?. Estoy inquieto. De verdad que no quiero tener una relación laboral contigo. Es decir trabajar para tí y que tú me pagues. La verdad no creo que a tí te interese. Sé que tienes muchos ángeles con capacidades y obediencia superiores. Así mismo, decidí que tampoco quiero tener una relación comercial contigo. O sea que no quiero crear una compañia para hablar de tí y luego cobrarte una comisión por la publicidad hecha. No creo que necesites agentes comerciales que salgan a vender tus obras. ¿Acaso los cielos no cuentan tu gloria y el firmamento anuncia la obra de tus manos?. Pero como insistías tanto en tener una relación personal conmigo, decidí investigar más a fondo qué es lo que estas buscando.

Así que la verdad es que estuve leyendo la biblia y encontré que tu anhelo es tener amigos. Amigos confiables, sinceros que no te busquen solo por lo que tienes para dar. Amigos con los que puedas comportarte como Padre y no como patrón. Amigos que anhelen tu presencia antes que tus obras. Amigos que les guste sentarse para conversar contigo y no interesados que te buscan sólo para pedir tu ayuda y bendición.

Entonces, después de pensarlo detenidamente y conociendo tus antecedentes, quiero inscribirme para comenzar a ser uno de esos que cuentas como amigos verdaderos.

Quedo a la espera de tus comentarios.

Tu próximo amigo

Ya sabes quien.