Necesito encontrar a Dios. Parte 2

Por fín había entendido que la maldad del mundo no le era indiferente a Dios. Había comprendido que él no era sordo a los sufrimientos del hombre. ¿Pero que podía hacer yo? Solo soy un hombre; uno lleno de problemas y dificultades. ¿Qué podía hacer yo? ¿Podría acaso ser útil sabiendo que ni siquiera he podido arreglar mis propias angustias? ¿Cómo podía serle útil a Dios sabiendo que tengo tantas dificultades sin resolver? La lógica me indica que primero debía arreglar mis angustias y luego tratar de serle útil a Dios. ...Pero mi lógica no sigue los planes divinos.

Busqué una respuesta y encontré Juan 15:16 "Ustedes no fueron los que me eligieron a mí, sino que fui yo quien los eligió a ustedes. Les he mandado que vayan y sean como ramas que siempre dan mucho fruto. Así, mi Padre les dará lo que ustedes le pidan en mi nombre." Entonces supe que a pesar de mis cargas, problemas, angustias y defectos, no era yo quien había sido la causa de este desazon por la maldad humana. Era Dios que estaba moviendo mi corazón para que dejara de mirar mis propios problemas y comenzara a mirar el cuadro completo. Pero todavía no se que hacer con mis angustias. Tal vez no sean tan grandes como las del resto del mundo, pero no me he podido deshacer de ellas.

Así que cómo puede ser que Dios mire a mi vida y vea algo que no tengo. ¡No entiendo! Solo sé que no soy el único al que Dios está buscando. Tal vez también te está buscando a tí. Acompáñame en su búsqueda.