Pastor: ¿Qué es lo que te ocurre? Traes un aspecto muy grave...
Pastor Asociado: En efecto pastor y no es para menos. Pasan ciertas cosas en la iglesia demasiadas extraordinarias. El caso es tan raro, tan singular, tan extraño, que no se como explicárselo.
P: Hermano, me pone usted en ascuas.
PA: Pastor, en el grupo de danza esta el hermano José que siempre se ha distinguido por su fé y su entrega a las manos del Señor......me han contado de poco tiempo a hoy, está presentando un aire misterioso, su mirada torva, el ademán inquieto y color pálido.
P: ¡Vaya un cambio!
PA: Pero pásmese Pastor, el hermano que le digo busca siempre los rincones oscuros para vomitar cuervos.
P: ¿Cuervos, dice usted?
H: Exacto: cuervos enteros y verdaderos.
P: Pero eso no puede ser, hermano; ese es el más grande de los absurdos.
H: Por desgracia es cierto, Pastor.
P: Y… ¿qué piensa usted que debemos hacer?
PA: Hay que sacarle los chuckys que tenga: el hermano que vomita cuervos encierra un misterio tenebroso. Allí debe haber una influencia infernal, que no sabemos hasta que punto y en que forma puede amenazarnos.
P: ¿Habla usted seriamente, hermano?
PA: Seriamente, Pastor.
P:¿Ha visto usted los cuervos a que se refiere?
Pa: No Pastor, pero los ha visto el supervisor.
P:Llámamelo, por favor.
PA: En el acto Pastor.
Pastor:¿Cuantos cuervos a vomitado el hermano José?
Supervisor: Dos, Pastor.
P: Como dos, si me acaba de decir el Pastor Asociado, que usted le había dicho que son varios.
S: No pastor, no son mas que dos, según me lo dijo el Líder de Jóvenes.
P:¿Luego usted no los ha visto?
S: No pastor, cuando quise verlos ya habían echado a volar.
P: Que venga el Líder de Jóvenes, por favor.
P:¿Cuénteme hermano del famoso cuervo arrojado por el hermano José?
Líder de Jóvenes: No eran dos cuervos, Pastor.
P:¿Entonces que era?
LJ: Eran un ala de cuervo
P:¿Un ala?
LJ: Si, Pastor.
P:Caracoles, ¡como se ha reducido la especie! Estoy creyendo que al final me van a dejar sin una pluma.
P:¿Dónde están el ala?
LJ: No se, Pastor él que debe saber es el Líder de Danza quien fue el que me contó lo que le acabo de decir.
P:Llámame al Líder de Danza, por favor.
LJ: Con su permiso.
Pastor:Tráigame por favor el ala de cuervo que vomito el hermano José.
Líder de Danza: Yo no la he visto, ni la tengo Pastor.
P:Entonces, ¿Qué es lo que le ha contado al Líder de Danza?
LD: Le conté, lo que me dijo el hermano José, pero nada me costa personalmente.
P:¡Acabaremos con esto! Llámenme al hermano José.
Hermano José: Me necesita Pastor.
P:Dígame hermano ¿Qué es lo que se dice de usted?, ¿Qué alas, o que cuervos, o que cosas, ha vomitado usted que se lo ha dicho al Líder de Danza, al Líder de los Jóvenes y este al Supervisor y este al Pastor Asociado y este a mi?
HJ: Lo que le he dicho Pastor, es que había vomitado negro como el ala del cuervo.
El Pastor, al oír esto estallo en estrepitosa carcajada. En este momento entró el Pastor Asociado para pedir una repetición del famoso comentario.
Pastor: Ya lo ve usted Pastor Asociado, exclamo el Pastor sin dejar de reírse; ya ve usted en lo que ha venido a parar los cuervos de la historia.
Pastor Asociado: Pero, Pastor, como iba yo a dudar de tantos y tan autorizados testimonios.
P: Pero para que vea, ¡En adelante no se deje llevar por chismes. Estábamos a punto de poner en tela de juicio el buen nombre del hermano José por una absurda patraña!
No solo el que le quita la vida a una persona es un asesino, esa no es la única forma de matar. La palabra de un cristiano es de mucha credibilidad por esta razón debemos siempre estar seguros de las cosas que hablemos pues en ellas llevamos el respaldo de nuestro padre y creador.
El chisme es uno de los venenos mas mortales que tiene la lengua, capaz de matar familias completas. La palabra en Lv. 19 : 16 (T.L.A.) nos dice "
También dice <
Nunca digas: no tengo nada que hacer, y resultar buscando la casa de nuestros hermanos para asesinar nuestra familia a causa de nuestra lengua. Dios nos dice: <
No hay comentarios.:
Publicar un comentario